Saluda al sol
En realidad, la creencia proviene de un artículo publicado en 1993 en Nature por la psicóloga Frances Rauscher. En su estudio, Rauscher descubrió que los estudiantes universitarios que escuchaban 10 minutos de Mozart antes de una serie de pruebas ganaban hasta 8 puntos de coeficiente intelectual espacial. Durante la década siguiente, el estudio se tergiversó y comercializó hasta convertirse en el “efecto” del que se habla hoy, aplicable a toda la música clásica y a todos los niños pequeños.
Aunque la relación entre Mozart y los bebés inteligentes aún no se ha demostrado, eso no ha impedido a los investigadores estudiar los efectos de la música en el desarrollo del cerebro de los recién nacidos. Hasta ahora los resultados han sido prometedores, y varios estudios, que se comentan a continuación, han demostrado otros beneficios de poner música a tu hijo.
Un estudio realizado por el Instituto de Ciencias del Aprendizaje y del Cerebro (I-LABS) de la Universidad de Washington descubrió que poner música a los bebés de 9 meses mejoraba la comprensión del ritmo en el habla y la música.
El estudio siguió a 20 bebés mientras se les ponía música infantil mientras realizaban algunos ejercicios de ritmo con sus padres. A otro grupo de 19 bebés se les dio juguetes para jugar, pero no se les puso música. Al cabo de una semana, se escaneó el cerebro de los bebés mientras se les ponía música, sólo que esta vez se interrumpía la canción de vez en cuando para observar los efectos en el cerebro. Los bebés del “grupo de la música” mostraron mayores respuestas a las interrupciones de la música y el habla.
¿Cómo puedo estimular a mi bebé de 2 meses?
Aplaude suavemente las manos de tu bebé o estira los brazos (cruzados, abiertos o por encima de la cabeza). Mueve suavemente las piernas de tu bebé como si pedaleara una bicicleta. Utiliza un juguete favorito para que tu bebé se centre en él y lo siga, o agita un sonajero para que lo encuentre. Realiza diferentes expresiones faciales para que tu bebé las imite.
¿Qué actividades se pueden hacer con un bebé de 2 meses?
Ayudar al desarrollo del recién nacido a los 2-3 meses
Intenta realizar actividades sencillas como hablar, leer, cantar canciones como “Twinkle twinkle little star” y jugar a juegos como el “peekaboo”. Sonríe a tu bebé: cuando tu bebé te ve sonreír, libera sustancias químicas naturales en su cuerpo que le hacen sentirse bien, seguro y protegido.
¿Cómo se cansa un niño de 2 meses?
Envoltura (para bebés). Masaje. Cualquier movimiento ligero y repetitivo, como el balanceo o la oscilación. Dar de comer (no hasta que los bebés se duerman, sino sólo hasta que se adormezcan).
Comentarios
Cuanto antes involucre a su hijo con la música, más podrá aumentar su aptitud musical y proporcionarle una rica experiencia musical para toda la vida (Gordon 1987), y puede empezar a hacerlo sin ninguna formación o experiencia musical.
Los niños pequeños empiezan a cantar pequeñas partes de las canciones que escuchan alrededor de los dos años y medio, aunque las melodías no suenan con precisión a nuestros oídos, ya que se deslizan por los contornos generales del tono (Haroutounian 2002).
Entre los 5 y los 6 años, la mayoría de los niños empezarán a cantar en el sentido tradicional, cuando sean capaces de llevar una melodía de forma consistente y cantar con un ritmo constante; algunos niños desarrollarán estas habilidades ya a los 3 o 4 años (Moog 1976) (Sloboda 1976).
Es posible que su bebé o niño pequeño tenga una inclinación musical especial si se mueve o canta en respuesta a la música, si muestra una atención o fascinación especial cuando se toca música o si disfruta especialmente cantando y experimentando con su voz, como se describe en este post.
Si tu hijo muestra estos comportamientos, es estupendo, si no es así también está bien. Los niños tardan años en desarrollar plenamente sus habilidades musicales, y puedes utilizar las actividades de este post para dar a tu hijo la habilidad más importante de todas: la capacidad de comprometerse con la música desde una edad temprana para construir una relación de por vida con la música.
Saluda
Los primeros seis meses de la vida de un bebé son una época increíble, ya que pasa de ser un recién nacido con la cabeza blanda a una persona diminuta que puede sentarse y jugar. Aunque tu bebé se desarrollará a su propio ritmo, hay formas de estimular su crecimiento y razones de peso para hacerlo.
“Estimular el cerebro de tu hijo durante esta época y proporcionarle situaciones en las que pueda explorar le ayuda a aprender cosas que le ponen en contacto con su entorno”, dice el doctor Robert Myers, psicólogo de niños y adolescentes, fundador del Instituto de Desarrollo Infantil y profesor clínico adjunto de Psiquiatría y Comportamiento Humano en la Facultad de Medicina de la Universidad de California en Irvine.
Qué hacer: Mientras tu bebé está tumbado de espaldas, sujeta el juguete frente a su cara y, si es necesario, muévelo lentamente o tócalo suavemente con él para llamar su atención. A continuación, mueve el juguete de un lado a otro, animándole a seguirlo con los ojos.
Qué hacer: La próxima vez que tu pequeño tenga una crisis o se resista a dormir la siesta, cántale una nana con voz relajante. ¿No te acuerdas de los clásicos? No hay problema: puedes encontrar las letras de las canciones en Internet o inventar las tuyas propias.
Música sensorial para bebés
Lo primero que aprenderá tu bebé es a asociarte con la satisfacción de sus necesidades. Así, la sensación de tu tacto, el sonido de tu voz y la visión de tu cara empezarán a significar alimento, calor y confort.
Incluso a esta temprana edad, los bebés están preparados para conocer el mundo que les rodea. A tu recién nacido le encanta mirarte a la cara. Los recién nacidos pueden reconocer y responder a la voz de los padres (o a otros sonidos interesantes) poniendo cara de alerta y volviéndose menos activos. Los bebés pueden intentar averiguar de dónde procede un sonido mirando a su alrededor.
Durante el primer mes de vida, el recién nacido pasará gran parte del día durmiendo o pareciendo somnoliento. A lo largo de las siguientes semanas o meses, tu bebé empezará a estar despierto y alerta durante más tiempo. Aprenderás a reconocer cuándo tu bebé está preparado para aprender y jugar:
Mientras cuida a su recién nacido, hable, sonría e interactúe con él. Presta atención y responde a las señales de tu bebé. Por ejemplo, observa cómo se mueve o empieza a emitir sonidos cuando le hablas. Túrnense para “hablar” con el otro. Así es como tu bebé aprende a comunicarse.