Tipos de droga estimulante

Para qué sirven los estimulantes
Los fármacos estimulantes aceleran los mensajes que viajan entre el cerebro y el cuerpo. Por ello, suelen aumentar el pulso y la frecuencia respiratoria, elevar la presión arterial, suprimir el apetito y dilatar las pupilas.
Los fármacos depresores ralentizan el funcionamiento del cerebro. Suelen aliviar la ansiedad. No hacen que la persona se sienta necesariamente deprimida, sino que reducen la coordinación y perjudican la concentración y el juicio.
Las drogas alucinógenas distorsionan la percepción de la realidad, es decir, cambian la forma en que una persona ve, oye y siente una situación. Por ejemplo, una persona puede ver cosas que no existen en realidad, o una experiencia sensorial normal puede ser exagerada (como ver los colores más vivos).
Los efectos de los alucinógenos varían, aunque a menudo producen sensaciones de relajación. Otros efectos a corto plazo son náuseas, aumento del ritmo cardíaco, mareos, confusión, torpeza y cambios emocionales.
No existe un nivel seguro de consumo de alcohol o drogas y el uso de cualquier droga siempre conlleva algún riesgo. La combinación de drogas, también conocida como "policonsumo", aumenta el riesgo y puede ser extremadamente peligrosa. Los efectos de la mezcla de drogas pueden ser imprevisibles y las personas corren un mayor riesgo de sobredosis, incluso de muerte.
¿Cuáles son los 6 tipos diferentes de estimulantes?
¿Qué drogas son estimulantes? La cocaína, la metanfetamina, el MDMA, el khat, la nicotina y los estimulantes con receta.
¿Cuáles son los principales tipos de estimulantes?
Los estimulantes incluyen la cafeína, la nicotina, las anfetaminas y la cocaína.
Estimulantes para el TDAH
Otros estimulantes de uso comúnEfectos de los estimulantesNo existe un nivel seguro de consumo de drogas. El uso de cualquier droga siempre conlleva algún riesgo. Es importante tener cuidado cuando se toma cualquier tipo de droga.Los estimulantes afectan a cada persona de forma diferente, en función de:Para las dosis más bajas, los efectos incluyen:Las dosis más altas pueden dar lugar a: Uso de estimulantes con otras drogas Los efectos de tomar estimulantes con otras drogas -incluyendo medicamentos de venta libre o recetados- pueden ser impredecibles y peligrosos.
Reducir el dañoEl uso de estimulantes puede ser más peligroso cuando:Dependencia y toleranciaLas personas que usan estimulantes regularmente pueden desarrollar dependencia y tolerancia a ellos. La tolerancia significa que es necesario tomar mayores cantidades de estimulantes para obtener el mismo efecto.La dependencia de los estimulantes puede ser psicológica, física o ambas. Las personas dependientes de los estimulantes descubren que el consumo de la droga se convierte en algo mucho más importante que otras actividades de su vida. Las personas psicológicamente dependientes de los estimulantes pueden sentir la necesidad de consumirlos cuando se encuentran en un entorno específico o cuando se relacionan con amigos.La dependencia física se produce cuando el cuerpo de una persona se adapta a los estimulantes y se acostumbra a funcionar con la presencia del estimulante.Conseguir ayudaSi su consumo de estimulantes está afectando a su salud, su familia, sus relaciones, su trabajo, sus estudios, sus finanzas u otras situaciones vitales, o si está preocupado por un ser querido, puede encontrar ayuda y apoyo.
Las mejores drogas estimulantes
Un estimulante es una droga que acelera el sistema nervioso central para aumentar la actividad neuronal en el cerebro. Algunos ejemplos son las anfetaminas, la cocaína y el crack, la cafeína, la nicotina y el éxtasis. Las drogas estimulantes tienden a hacer que la gente se sienta más alerta y concentrada y a veces se las llama "estimulantes".
Los estimulantes aumentan la presión arterial, el ritmo cardíaco y la respiración y reducen el deseo de comer. Una vez que los efectos desaparecen, las personas pueden sentirse cansadas, hambrientas y deprimidas, lo que a veces se denomina "bajón".
Históricamente, las drogas estimulantes como la efedrina se utilizaban para tratar el asma y otros problemas respiratorios, así como la obesidad, el insomnio y ciertos trastornos neurológicos. Las anfetaminas también se utilizaron durante la Segunda Guerra Mundial para aumentar el estado de alerta y la concentración de los soldados (véase nuestra página sobre las anfetaminas para saber más sobre su historia).
En la década de 1960, al hacerse evidente su potencial de abuso y adicción, las autoridades comenzaron a controlar los estimulantes como las anfetaminas y se restringió su uso médico. Ahora, los estimulantes sólo se utilizan para un pequeño número de afecciones médicas como el TDAH, la narcolepsia y, ocasionalmente, la depresión. Sin embargo, la cafeína, un estimulante suave, sigue siendo una de las drogas más populares, ya que se encuentra en el té, el café y el chocolate.
Lista de medicamentos estimulantes
Las drogas estimulantes aceleran los mensajes que viajan entre el cerebro y el cuerpo. Por ello, suelen aumentar el pulso y la frecuencia respiratoria, elevar la presión arterial, suprimir el apetito y dilatar las pupilas.
Los fármacos depresores ralentizan el funcionamiento del cerebro. Suelen aliviar la ansiedad. No hacen que la persona se sienta necesariamente deprimida, sino que reducen la coordinación y perjudican la concentración y el juicio.
Las drogas alucinógenas distorsionan la percepción de la realidad, es decir, cambian la forma en que una persona ve, oye y siente una situación. Por ejemplo, una persona puede ver cosas que no existen en realidad, o una experiencia sensorial normal puede ser exagerada (como ver los colores más vivos).
Los efectos de los alucinógenos varían, aunque a menudo producen sensaciones de relajación. Otros efectos a corto plazo son náuseas, aumento del ritmo cardíaco, mareos, confusión, torpeza y cambios emocionales.
No existe un nivel seguro de consumo de alcohol o drogas y el uso de cualquier droga siempre conlleva algún riesgo. La combinación de drogas, también conocida como "policonsumo", aumenta el riesgo y puede ser extremadamente peligrosa. Los efectos de la mezcla de drogas pueden ser imprevisibles y las personas corren un mayor riesgo de sobredosis, incluso de muerte.