Estimulos de marketing ejemplos

Incentivos de marca
¿A quién no le gusta recibir algo a cambio de nada, o al menos por un precio inferior al habitual? Como empresa, puede aplicar fácilmente esta idea en su estrategia de marketing ofreciendo incentivos para motivar a sus clientes.
A la hora de elegir incentivos de marketing, es importante hacerlo en función de su objetivo específico. ¿Quiere aumentar la notoriedad de su marca, captar clientes potenciales, motivar a la gente para que compre, aumentar la tasa de retención de clientes o conseguir que la gente recomiende su empresa a otras personas? Hay un incentivo que puede ayudarle.
Estos incentivos atraen la atención hacia su marca, sobre todo de personas que aún no han comprado en su empresa. La gente necesita saber quién es usted, qué ofrece y qué representa antes de decidirse a comprarle.
Los incentivos de notoriedad de marca no se recompensan a cambio de nada, ya que su intención es simplemente ayudar a que se corra la voz sobre usted. Ofrezca estas recompensas de forma gratuita y estratégica, ¡y cosechará sus propios frutos!
La gente se ha enterado de la existencia de su marca, pero ¿cómo puede convertir esta atención en clientes potenciales? Ciertos incentivos pueden ayudar a motivar a la gente para que facilite su información de contacto, de modo que pueda animarles a realizar una compra.
¿Qué son los incentivos de marketing?
Pero, ¿qué es exactamente el marketing de incentivos? El Business Dictionary lo define como: "Uso de dispositivos de motivación como concursos, juegos, primas, precios especiales, para promover la venta de una mercancía o servicio".
¿Cuáles son los tres tipos de incentivos?
Pero los incentivos no son sólo de naturaleza económica: los hay de tres tipos: Incentivos económicos: ganancia/pérdida material (hacer lo que nos conviene) Incentivos sociales: ganancia/pérdida de reputación (que nos vean hacer lo correcto) Incentivos morales: ganancia/pérdida de conciencia (hacer/no hacer lo "correcto").
Estrategia de marketing de incentivos
Las llamadas de ventas ya no son lo que eran. Para empezar, los vendedores interactúan con clientes que disponen de mucha información previa, gracias a la disponibilidad de canales digitales y presenciales. Los vendedores de hoy en día también se encuentran con un mayor número de personas a las que deben influenciar en las organizaciones de los clientes y se les pide que vendan nuevos tipos de productos complejos y digitales. Como resultado, el ciclo medio de compra es más largo, lo que hace más difícil prever la demanda de los clientes y utilizarla para establecer objetivos.
Para lograr el crecimiento en este entorno de ventas cambiante y desafiante, muchas empresas han realizado cambios importantes, como la creación de nuevos canales digitales, la incorporación de funciones especializadas y la adopción de la venta en equipo. Sin embargo, hay otro cambio crucial que tiende a pasarse por alto. Para abordar plenamente las complejidades actuales es necesario desarrollar modelos de compensación nuevos y bien pensados que proporcionen una motivación clara para que un equipo de ventas pueda seguir vendiendo con eficacia. A los vendedores no se les debe decir lo que tienen que hacer; deben sentirse persuadidos para adoptar comportamientos que apoyen la estrategia de salida al mercado de la empresa. Ajustar la combinación de comisiones, cuotas, salarios y bonificaciones para el personal de ventas puede ser un motor de crecimiento. Se ha comprobado que las revisiones inteligentes de los modelos de compensación tienen un impacto en las ventas un 50% mayor que los cambios en las inversiones publicitarias.
Ejemplos de incentivos de precios
Los incentivos son una forma probada de influir en el comportamiento de los empleados y, en última instancia, de mejorar el rendimiento de la empresa. Ahora bien, hay varios tipos de programas de incentivos para empleados que las empresas suelen utilizar. Pero lo más importante es que encuentre el programa que mejor funcione para su empresa.
Muchas empresas también están dispuestas a pagar primas de retención para mantener a los empleados a bordo. Una prima de retención es una compensación económica que se paga a los empleados que han permanecido en su organización durante un tiempo determinado. La ofrecen como incentivo para asegurarse de que los empleados no abandonan la empresa.
La participación en los beneficios es un incentivo variable que se paga al empleado cuando la organización obtiene beneficios. Se mide por el crecimiento de los ingresos o del beneficio neto, o por ambos. La empresa puede ofrecer, por ejemplo, un determinado porcentaje de los beneficios de la empresa para repartir entre los empleados.
Es uno de los ejemplos más comunes de planes de incentivos para empleados. Cuando se hace bien, es una forma estupenda de recompensar a los empleados, sobre todo si se hacen ajustes en función de las evaluaciones de rendimiento y las contribuciones individuales.
Incentivos de marketing para clientes
En este artículo, compararemos y contrastaremos los sistemas tradicionales de incentivos de ventas con los programas de incentivos modernos, esbozaremos cinco tipos de programas de incentivos que puede utilizar hoy en día, exploraremos ideas de incentivos de ventas y analizaremos cómo aplicar el incentivo de venta adecuado a su empresa. Programas tradicionales de incentivos de ventas
Al principio del proceso de compra, los representantes desempeñaban un papel considerable en la educación de los clientes potenciales y la creación de relaciones con los clientes. Esta estructura permitía establecer objetivos a gran escala basados en métricas predecibles y fáciles de medir.
Por ejemplo, un incentivo podía basarse estrictamente en el número de unidades vendidas de un determinado producto en un mes, trimestre o año. Había menos necesidad de tener en cuenta otros factores, como la experiencia del cliente o cómo influía la competencia en el proceso de toma de decisiones.
Por lo general, el representante de ventas era el dueño del proceso de creación de relaciones con el cliente y el responsable de cerrar el trato. Esto facilitaba a las empresas la previsión de resultados y la estandarización de los KPI en función de los objetivos comerciales.