Estimulos y respuestas en las plantas
Estímulo y respuesta del trigmotropismo
A lo largo de su carrera, se ha interesado especialmente por la sensibilidad de las plantas a los estímulos. Actualmente, desea ayudar a comprender cómo la planta puede poseer una verdadera capacidad de memoria, que es, a la vez, tan diferente de la nuestra y tan bien adaptada a las características de su entorno próximo.
Michel Thellier ha desarrollado una carrera de profesor de fisiología vegetal y biofísica en la Universidad. Ha sido editor jefe de la revista americana "J. Trace Microprobe Techniques" y editor asociado de la serie "Biology" de las actas de la Academia Francesa de Ciencias. Ha sido autor o editor de una docena de libros sobre biología vegetal y celular. Es miembro de la Academia Francesa de Ciencias y de la Academia Francesa de Agricultura. A lo largo de su carrera, se ha interesado especialmente por la sensibilidad de las plantas a los estímulos. En la actualidad, desea ayudar a comprender cómo la planta puede poseer una verdadera capacidad de memoria, que es, a la vez, tan diferente de la nuestra y tan bien adaptada a las características de su entorno cercano.
Respuestas de las plantas al tacto a los estímulos mecánicos
Las plantas, al igual que los animales y otros organismos, deben adaptarse a sus entornos en constante cambio. Mientras que los animales son capaces de trasladarse de un lugar a otro cuando las condiciones ambientales se vuelven desfavorables, las plantas no pueden hacer lo mismo. Al ser sésiles (incapaces de desplazarse), las plantas deben encontrar otras formas de afrontar las condiciones ambientales desfavorables. Los tropismos de las plantas son mecanismos por los que se adaptan a los cambios ambientales. Un tropismo es un crecimiento que se dirige o se aleja de un estímulo. Los estímulos más comunes que influyen en el crecimiento de las plantas son la luz, la gravedad, el agua y el tacto. Los tropismos de las plantas difieren de otros movimientos generados por estímulos, como los movimientos násticos, en que la dirección de la respuesta depende de la dirección del estímulo. Los movimientos násticos, como el movimiento de las hojas en las plantas carnívoras, son iniciados por un estímulo, pero la dirección del estímulo no es un factor en la respuesta.
Los tropismos de las plantas son el resultado de un crecimiento diferencial. Este tipo de crecimiento se produce cuando las células de una zona de un órgano vegetal, como un tallo o una raíz, crecen más rápidamente que las células de la zona opuesta. El crecimiento diferencial de las células dirige el crecimiento del órgano (tallo, raíz, etc.) y determina el crecimiento direccional de toda la planta. Se cree que las hormonas vegetales, como las auxinas, ayudan a regular el crecimiento diferencial de un órgano de la planta, haciendo que ésta se curve o doble en respuesta a un estímulo. El crecimiento en dirección a un estímulo se conoce como tropismo positivo, mientras que el crecimiento en dirección contraria a un estímulo se conoce como tropismo negativo. Las respuestas tropicales más comunes en las plantas incluyen el fototropismo, el gravitropismo, el trigmotropismo, el hidrotropismo, el termotropismo y el quimotropismo.
3 formas en que las plantas responden a su entorno
Los animales pueden responder a los factores ambientales desplazándose a un nuevo lugar. Las plantas, sin embargo, están arraigadas en un lugar y deben responder a los factores ambientales que las rodean. Las plantas tienen sistemas sofisticados para detectar y responder a la luz, la gravedad, la temperatura y el tacto físico. Los receptores detectan los factores ambientales y transmiten la información a los sistemas efectores -a menudo a través de mensajeros químicos intermedios- para provocar las respuestas de la planta.
Las plantas tienen una serie de usos sofisticados de la luz que van mucho más allá de su capacidad de fotosíntesis de azúcares de bajo peso molecular utilizando únicamente dióxido de carbono, luz y agua. La fotomorfogénesis es el crecimiento y desarrollo de las plantas en respuesta a la luz. Permite a las plantas optimizar el uso de la luz y el espacio. El fotoperiodismo es la capacidad de utilizar la luz para seguir el tiempo. Las plantas pueden distinguir la hora del día y la época del año detectando y utilizando las distintas longitudes de onda de la luz solar. El fototropismo es una respuesta direccional que permite a las plantas crecer hacia la luz o incluso alejarse de ella.
Tropismos en las plantas
Como hemos estudiado en nuestro estudio del Sistema Nervioso, los animales responden a los estímulos mediante señales eléctricas y químicas. También hemos aprendido que los mensajeros químicos de nuestro Sistema Endocrino se utilizan para satisfacer las necesidades de la vida.
Las plantas también tienen medios para responder a su entorno para vivir con éxito. Para ello, utilizan sustancias químicas similares a las del sistema endocrino. Esta página web examinará estas respuestas de las plantas.
Luz - La luz, obviamente, afecta a la capacidad de las plantas para crecer porque la luz es necesaria para la fotosíntesis. A través de la fotosíntesis, la planta produce sus moléculas portadoras de energía. También es necesaria para la producción de clorofila.
Un tropismo es un fenómeno biológico que indica el crecimiento o el movimiento de giro de un organismo biológico, generalmente una planta, en respuesta a un estímulo ambiental. En los tropismos, esta respuesta depende de la dirección de la especie. La palabra tropismo procede del griego trope ("girar" o "cambiar"). Los tropismos suelen recibir el nombre del estímulo implicado y pueden ser positivos (hacia el estímulo) o negativos (alejándose del estímulo).