Respuesta a estimulos de los seres vivos

Los seres vivos responden a estímulos explique con un ejemplo
Hasta ahora hemos abordado seis de las propiedades tradicionales de los organismos vivos: comer, respirar, excretar, moverse, crecer y reproducirse. La única que nos queda es "responder a influencias externas". Un perro que saliva al olor de la comida, una flor que se abre a la luz del sol y un gusano que se arrastra hacia la humedad son ejemplos de organismos que responden a estímulos de su entorno. Todos los organismos responden a su entorno para mejorar sus posibilidades de supervivencia y reproducción.Palabras claveEstas palabras clave han sido añadidas por la máquina y no por los autores. Este proceso es experimental y las palabras clave pueden actualizarse a medida que mejore el algoritmo de aprendizaje.
Reglamento
La respuesta a los estímulos es cualquier acción realizada por un sistema biológico tras detectar una variación en su equilibrio homeostático a través de estímulos. Las respuestas suelen ser acciones correctivas que contrarrestan el cambio restableciendo el equilibrio en el caso de los bucles homeostáticos de retroalimentación negativa. Sin embargo, en los bucles positivos, menos comunes, una respuesta puede aumentar el desequilibrio creando una cascada de acontecimientos repetitivos.
La termorregulación es un ejemplo de mecanismo de respuesta a estímulos. En un ambiente frío (estímulo de baja temperatura), los vasos sanguíneos humanos se contraen (vasoconstricción) para aumentar la retención de calor, mientras que en un ambiente caluroso (estímulo de alta temperatura), los vasos sanguíneos se dilatan (vasodilatación) para aumentar la pérdida de calor.
Las células responden a los estímulos mediante efectores orgánicos. Las señales procedentes de los centros de control del sistema nervioso y endocrino dirigen a los efectores, como las células de los músculos o los vasos sanguíneos, para que respondan a los estímulos y garanticen la homeostasis. Los distintos estímulos son detectados por diferentes receptores repartidos por todo el organismo.
La forma en que los seres vivos responden a los estímulos se denomina
Todos los organismos vivos comparten varias características o funciones clave: orden, sensibilidad o respuesta al entorno, reproducción, adaptación, crecimiento y desarrollo, homeostasis, procesamiento de la energía y evolución. En conjunto, estas características sirven para definir la vida. Las distintas fuentes pueden utilizar términos ligeramente diferentes para describir estas características, pero las ideas básicas siempre están presentes.
Los organismos son estructuras altamente organizadas y coordinadas que constan de una o más células. Incluso los organismos unicelulares más simples son extraordinariamente complejos: en el interior de cada célula, los átomos forman moléculas que, a su vez, constituyen orgánulos y otras inclusiones celulares. En los organismos pluricelulares, como el sapo de la figura 1, células similares forman tejidos. Los tejidos, a su vez, colaboran para crear órganos (estructuras corporales con una función diferenciada). Los órganos trabajan juntos para formar sistemas orgánicos.
Los organismos responden a diversos estímulos. Por ejemplo, las plantas pueden inclinarse hacia una fuente de luz, trepar por vallas y paredes o responder al tacto (Figura 2). Incluso las diminutas bacterias pueden acercarse o alejarse de sustancias químicas (proceso denominado quimiotaxis) o de la luz (fototaxis).
Todos los seres vivos responden a estímulos verdadero o falso
Un organismo unicelular puede ser procariota o eucariota. Los procariotas están representados por dos dominios distintos: las bacterias y las arqueas. Los organismos eucariotas se caracterizan por la presencia de un núcleo celular delimitado por una membrana y contienen compartimentos adicionales delimitados por membranas denominados orgánulos (como las mitocondrias en animales y plantas y los plástidos en plantas y algas, todos ellos considerados generalmente derivados de bacterias endosimbióticas)[3] Los hongos, los animales y las plantas son ejemplos de reinos de organismos dentro de los eucariotas.
Las estimaciones sobre el número de especies actuales de la Tierra oscilan entre 2 millones y 1 billón,[4] de las cuales se han documentado más de 1,7 millones.[5] Se calcula que más del 99% de todas las especies, que ascienden a más de cinco mil millones de especies,[6] que han existido alguna vez, se han extinguido[7][8].
El término "organismo" (del griego ὀργανισμός, organismos, de ὄργανον, organon, es decir, "instrumento, utensilio, herramienta, órgano del sentido o de la aprehensión")[11][12] apareció por primera vez en la lengua inglesa en 1703 y adoptó su definición actual en 1834 (Oxford English Dictionary). Está directamente relacionado con el término "organización". Existe una larga tradición de definir a los organismos como seres autoorganizados, que se remonta al menos a la Crítica del Juicio de Immanuel Kant de 1790[13].